Mes: mayo 2017
La dama Silencio
Cualquiera diría que Silencio es una dama que se viste de blanco. Nada para decir, nada para mostrar.
Sin embargo, Silencio es una dama y como tal sabe vestirse para la ocasión. Leer el resto de esta entrada »
Flores para un funeral
Escrito para concursar en la Comunidad «Relatos Compulsivos»
Él la conoció fugazmente. Y la expresión no es azarosa. Fue la estrella fugaz a la que le pidió un deseo y se lo cumplió. Pero también podría ser comparable a la fugacidad de una abeja, que cuando pican se condenan… Leer el resto de esta entrada »
Maldita primavera
Escrito para el reto de la Comunidad «Escribiendo que es gerundio».
Fue esa maldita primavera la causa de mi tragedia.
Yo venía llevando las cosas como siempre. Mi vida de perro era lo que se puede decir lo esperado. Todos venían a visitar a mis amos y siempre tenían una mirada afectuosa y una caricia para mí.
Desplegaba mis habilidades con la pelota y con un hueso plástico que arrojaban lejos para que yo se los trajera. No sé por qué los humanos adoran esas cosas, como si la pérdida y el reencuentro fueran algo para lo que hay que entrenarse.
La cuestión es que yo me dejaba llevar por el camino usual. Cada día ya sabía quién vendría y qué perrerías esperaba. Leer el resto de esta entrada »
Inicio de un viaje
La ruta se mueve como una viborita inquieta. El vehículo avanza contra la impaciencia de llegar cuanto antes a esas vacaciones. Leer el resto de esta entrada »
Casa del viento
Allá, bajando del cerro
desliza su aliento amante.
Viene cantando en susurros.
Viene saltando, el tunante. Leer el resto de esta entrada »
Solo un mal día
Me censuran por decir lo que siento…
¿Me censuran por sentir? Leer el resto de esta entrada »
Ying y Yang
Solíamos dormir abrazados
como si fuéramos almohada uno del otro. Leer el resto de esta entrada »
Quien quiera saber cuán extensa es una hora…
Quien quiera saber
cuán extensa es una hora
que se dedique a esperar
o a desesperar. Leer el resto de esta entrada »
Lucha interminable
Jasir está desvelado. Eso le permite disfrutar de una de las maravillas de la vida. Escuchar los rumores de la noche en la sabana africana. No es que el espectáculo sea solo para privilegiados. Solo que las labores del día son tan agotadoras que uno cae rendido en su catre en cuanto el sol se oculta. Pero Jasir no descansa bien, algo lo preocupa… Leer el resto de esta entrada »
isladelosvientos 